Santuario en el Calabozo

Hoy les quiero compartir un poema.  No es de mi autoría pero es un obsequio.  Está inspirado en esas situaciones que me han puesto a prueba y me han ayudado a descubrir el gran secreto.  Y una vez más todo es gracias a Papá.  Estoy cubierta con la sangre preciosa de Cristo y mi padre es Dios...  Te amo Papá.

Santuario en el Calabozo

Vivo cautiva en el amor incorrecto
activa mi vida, con afán insurrecto.
Pido pan y me dan una serpiente,
lo miro a los ojos, tampoco arrepiente.
Que hay en su alma? No veo en sus ojos.
Como si algún cirujano
al corazón dio despojo.

Pero aún son los genes
que llenan mis venas
diferentes los trenes
pero los rieles me penan.

Cuando el odio supera al amor
y me siento culpable de no mirar
una fórmula secreta
que los pueda cambiar.
Pero debo entender en el alma
que la estatua cambiar no puede
que al fundirla para moldearla
sólo se destruye, su molde muere.

El único camino, es no vivir en el conflicto,
confinarse en mi propio corazón
es un mundo más que propicio.
Parece chico en mi pecho
pero es muy grande en mi alma
es un mundo increíble de hecho
me mudo entonces,
al juntar mis palmas.

Juako Miranda.

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