El rumbo de mis sueños

Y si decido equivocarme cientos de veces?.  Si decido que nadie puede saber lo que yo necesito más que yo misma?.  Si decido que nadie decida por mí?.

Hoy renuncio, a los paradigmas, a los estereotipos, a los sueños.  Nunca me ha gustado que me digan lo que debo hacer, siempre he hecho las cosas a mi modo y he sido feliz a mi manera.

Esto de la felicidad es muy complejo.  Cada uno decide si ser feliz o no, es verdad; pero siempre hay algo de magia, sin esa magia nada se puede explicar.

Sé que al leer esto vas a saber cuál es la magia de mi vida y, es que así te enamoraste de mí y, es que no puedo esperar a que las cosas pasen, nunca lo hice, no hay momento ni personas perfectas, yo sólo te jalé hacia mí desde el primer momento, desde el primer beso, desde el primer todo.

No hagas más prguntas, yo no puedo controlar a todas las partes de mi ser, lo intenté y puedo decirte que es imposible, ya renuncié.  Traté de interferir, de buscar sensaciones pasajeras, emociones momentáneas, caras, pastillas, peinados, sonrisas.  Pero no, mi corazón hace su trabajo y no he podido cambiar su rumbo.

Nunca me gustó lo fácil, entender sin preguntar, aceptar sin entender, rendirme mientras quiero hacer otra cosa.  Ya no se trata de correcto o incorrecto eso no existe; lo que yo decido es correcto, lo que yo decido es verdad, es mi verdad.

Voy por lo que me apasiona, sin pensarlo, sólo haciendo, sin errores, sin consecuencias, sin importarme lo que digan.  Voy por ti.

Desde el día en ese bus, cuando me preguntaste si decido amarte; lo decidí y desde entonces mi corazón sólo ha hecho su trabajo, sin preguntar nada y sin necesitar ninguna otra información que no fuera la decisión que quedó tomada aquella tarde mientras cruzaba mis piernas sobre las tuyas, nada más importaba, sólo esa pregunta, insignificante y sin sentido.

Cada corazón es diferente y simplemente no hay manera de entender su trabajo.  Nada de esto importa porque yo sé cuál es el trabajo del tuyo.

Y en la boda mirarás mis ojos brillantes, mi rostro sin maquillaje y mi pelo y, parecerá que todo está muy claro, todo volvió a su sitio "mejor amigo".

Todo será perfecto para los dos, perfecto para quién?.  Perfecto porque entendí los planes de tu corazón, pero el mío siguió trabajando igual que siempre, por eso ese día se habrá acabado la magia, porque no eras común y corriente, porque mi magia estaba en ti.